JESUS ANGEL SULBARAN PAREDES UN SACERDOTE DE ARMAS TOMAR
Rigoberto Márquez Dávila.
Sería a finales de año 1956, cuando se suicidó Don Cristóbal Rivas y el padre Sulbarán que estaba recién ordenado le hizo los funerales, posiblemente contraviniendo un precepto del Código del Derecho Canónico, donde establece que aquel cristiano que se suicidaba no le hacían exequias eclesiásticas católicas, no sé si es que posiblemente ya algún papa había eliminado lo estipulado, lo cierto fue que el padre se presentó a la casa de donde lo velaban, lo llevo a la iglesia acompañado de la multitud de gente, revestido con su capa negra adornada con símbolos dorados; al sacerdote después que pasó el entierro algunos le preguntaba que por qué había oficiado el funeral cuando Cristóbal se había suicidado, éste se limito a responder secamente: “Lo hice porque era mi padrino”. A poco tiempo, Monseñor Acacio Chacón lo nombró párroco de
Después de 30 años de casado, hacen unos 8 años se le murió la esposa, entonces él decidió volver a ejercer el ministerio sacerdotal. En este caso tuvo la intervención del Vaticano por Monseñor Elímina Rojo Paredes, entonces el clero venezolano lo mandó como sacerdote para las Mercedes Del Llano en el Estado Guárico, hasta hacen pocos días que nos llegó la noticia: “FALLECIÓ EL PADRE SULBARAN”.